Hallazgo revela contexto funerario de un personaje de la élite Sicán. Excavaciones en santuario histórico de Pomac se iniciaron en junio.
El corazón del Santuario Histórico Bosque de Pomac vuelve a ser el centro de atención del mundo científico por el reciente descubrimiento de una tumba de grandes dimensiones donde, hasta el momento, se han desenterrado los restos –en perfecto estado de conservación– de unos sesenta individuos que fueron sacrificados para rendir culto a un importante personaje de la élite que hace mil años gobernó la cultura Sicán o Lambayeque.
Este nuevo episodio de la arqueología empezó en junio del presente año cuando los investigadores Carlos Elera Arévalo y José Pinilla decidieron excavar un sistema de drenaje a escasos metros de la huaca Las Ventanas.
De pronto una porción de tierra color verdusco llamó su atención.
Continuaron las excavaciones y encontraron una serie de hoyos que, luego se supo, eran depósitos de alimentos.
Luego apareció un contexto funerario con los restos de una mujer decapitada con una aparente mancha de sangre cerca del cuello.
Entonces se dieron cuenta de que estaban frente a una enorme tumba con un gran hoyo concéntrico que mide unos 150 metros cuadrados y 8 metros de profundidad, en donde en los últimos seis meses han podido documentar más de 60 sacrificios humanos.
A lo largo de estos meses, los arqueólogos registraron dos conjuntos de restos óseos muy peculiares.
En uno de ellos, los antiguos pobladores de la cultura Lambayeque colocaron decenas de osamentas sin cabeza y en el otro pusieron como ofrendas unos treinta cráneos, además de recipientes como platos, los famosos huacos rey, cuencos de cerámica con alimentos y restos de perros y camélidos.
Sin embargo, lo que más impresiona a los investigadores es la disposición en la que fueron encontradas las osamentas.
En algunos casos da la sensación de que los sacrificados fueron violentamente arrojados desde lo alto.
Algunos están maniatados, otro grupo solo ha sido colocado en el lugar.
Los trabajadores del proyecto también encontraron infraestructura de riego, un pozo de agua, hornos, talleres de metalurgia y cerámica así como áreas de producción masiva de alimentos como chicha de maíz.
Todos estos detalles están muy asociados a grandes tumbas de élite, como la cámara funeraria donde se descubrió el Señor de Sicán.
Los sacrificios que acompañan a los personajes principales de Pomac, como el reciente descubrimiento de la huaca Las Ventanas, serían de personas de la zona, de origen mochica.
El director del Museo Nacional de Sicán, Carlos Elera, precisó que, según las hipótesis que barajan, “los gobernantes de la época pertenecerían a un linaje de prestigio del ámbito septentrional andino (provenientes de la zona comprendida entre Piura y Guayaquil)” y la población, principalmente de origen mochica, moraba los valles de Lambayeque hasta Jequetepeque (La Libertad).
Estas hipótesis son el resultado de una serie de investigaciones respaldadas por los docdoctores Izumani Shimada y Ken-ichi Shinoda del Museo Nacional de Ciencias de Tokio, que realizaron una serie de análisis de ADN de los gobernantes de Pomac y los compararon con personas que viven en lo que hoy es el territorio de Piura y Ecuador.
Según Elera, los entierros y ofrendas hallados en la huaca Las Ventanas formarían parte de una o dos cámaras funerarias en las que se enterró a dignatarios de la época.
Esto se sabrá en los siguientes meses.
Lo que preocupa a Elera son las permanentes amenazas del río La Leche, que en los últimos años ya arrasó importantes vestigios que incluso se encuentran debajo del actual cauce principal.
“El Gobierno Central ha dispuesto la creación de una unidad ejecutora para Pomac, pero nos preocupa que los recursos sean manejados por dependencias que desconocen la realidad de la zona arqueológica. En este caso la entidad técnica debe ser el museo de Sicán”, remarcó.
Se han hallado valiosos ceramios
La tumba forma parte de lo que se conoce como necropompa, que consiste en una serie de rituales religiosos en torno al ancestro. En este lugar se enterraban los personajes más importantes de Lambayeque.
Hasta el momento se han hallado centenares de ceramios como el huaco rey y pequeñas piezas con las representaciones de felinos, monos y carasmáscara.
Para evitar más daños en este nuevo contexto funerario se requiere una serie de obras que permitirán proteger los templos y mausoleos de Pomac, que forman parte del núcleo cultural Sicán. Estas consisten en la defensa ribereña de unos 7 kilómetros y limpieza del cauce del río La Leche. Asimismo, trabajos de rescate arqueológico sistemático en la zona y ejecución de obras de drenaje.
Los templos y mausoleos de Pomac están en peligro de desaparecer porque el río atraviesa los complejos arqueológicos.
Área protegida por el Estado.
El Santuario Histórico Bosque de Pomac (anteriormente Zona Reservada Batán Grande) se establece mediante Decreto Supremo Nº 034-2001-AG, el 3 de junio del 2001, sobre una superficie de 5.
887 hectáreas, en Ferreñafe (Lambayeque). Su objetivo de creación es conservar la unidad paisajística- cultural que forma parte del Bosque Seco Ecuatorial y el complejo arqueológico de la cultura Sicán.
Forma parte del Sistema Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado y es administrado por el Ministerio de Agricultura a través del Instituto Nacional de Recursos Naturales, en estrecha coordinación con el Gobierno Regional de Lambayeque, municipios, Instituto Nacional de Cultura, instituciones públicas y privadas, y la sociedad civil organizada.
Este santuario se encuentra ubicado en la cuenca baja del río La Leche, a 31,5 km de Chiclayo, y cuenta con un centro de interpretación que orienta a los turistas.
Fuente: El Comercio