Los incas siguen sorprendiendo al mundo pese a que su civilización floreció hace cientos de años. Sorprenden los vestigios de su rica cultura que han quedado para la posteridad y pueden ser apreciados a través de su arquitectura y algunas esculturas, textiles, entre otros.
El Palacio de Justicia de Lima es una obra arquitectónica que fue construida en el siglo XIX, con el objetivo de ser una réplica del Palacio de Justicia de Bruselas. Sin embargo, la obra quedó incompleta, ya que nunca se terminó de construir la cúpula que era característica de su homólogo belga.
A pesar de su condición inacabada, el Palacio de Justicia de Lima es una obra importante, ya que refleja la cosmovisión incaica.
La cosmovisión incaica era una visión holística del mundo, que consideraba que todo estaba conectado entre sí. Para los incas, el universo estaba dividido en tres mundos: el Hanan Pacha (mundo de arriba), el Kay Pacha (mundo de aquí) y el Uku Pacha (mundo de abajo).
El Palacio de Justicia de Lima refleja esta cosmovisión, ya que está construido en forma de un triángulo equilátero. El triángulo es una figura geométrica que representa la unidad y la armonía, y que también se asocia con el cosmos.
La forma triangular del Palacio de Justicia de Lima también se puede interpretar como una representación de los tres mundos de la cosmovisión incaica. El vértice superior del triángulo representa el Hanan Pacha, el mundo de arriba, donde habitan los dioses. Los dos vértices inferiores del triángulo representan el Kay Pacha y el Uku Pacha, los mundos de aquí y de abajo, donde habitan los humanos y los espíritus.
El Palacio de Justicia de Lima es un testimonio de la importancia de la cosmovisión incaica para esta cultura. La obra refleja la forma en la que los incas entendían el mundo que los rodeaba, y es un recordatorio de la riqueza y complejidad de su cultura.
Sin embargo, resulta notable la forma particular en la que esta cultura interpretaba y daba sentido al mundo que los rodeaba. Hoy en día esto es motivo de investigación para los estudiosos, quienes intentan entender la cosmovisión incaica a fin de comprender mejor a esta milenaria civilización.
Una mirada a la cosmovisión inca
La cosmovisión incaica: una conexión con la naturaleza
Los antiguos incas tenían una cosmovisión que se caracterizaba por una profunda conexión con la naturaleza. Para ellos, el mundo era un lugar sagrado, lleno de vida y energía.
La palabra «cosmovisión» viene del griego «kósmos» (mundo) y «visión» (mirada). Se refiere a la forma en que una persona o una cultura entiende el mundo que la rodea.
En el caso de los incas, su cosmovisión se basaba en la creencia de que todo estaba conectado. El mundo natural, los seres humanos y los dioses eran parte de una misma unidad.
Esta creencia se reflejaba en la forma en que los incas interactuaban con el mundo que les rodeaba. Respetaban la naturaleza y la consideraban una fuente de vida y sabiduría.
La tesis de Nelson Paucca Gonzales
El autor Nelson Paucca Gonzales, en su tesis «La cosmovisión en la sociedad incaica», sostiene que la cosmovisión incaica se basaba en tres elementos fundamentales:
El pacha, que representa el mundo en su totalidad.
El runa, que representa al ser humano.
El waka, que representa lo sagrado.
El pacha, o mundo, se dividía en tres dimensiones:
El Hanan pacha, el mundo de arriba, donde habitaban los dioses.
El Kay pacha, el mundo de aquí, donde habitaban los seres humanos.
El Uku pacha, el mundo de abajo, donde habitaban los espíritus.
El runa, o ser humano, era considerado un elemento importante del pacha. Los incas creían que los seres humanos tenían un papel que desempeñar en el mantenimiento del equilibrio del mundo.
El waka, o lo sagrado, estaba presente en todo el pacha. Los incas creían que los dioses, los espíritus y la naturaleza eran sagrados.
De los manifestado podriamos concluir que la cosmovisión incaica era una visión del mundo holística y respetuosa de la naturaleza. Esta cosmovisión sigue siendo importante para muchas personas en la actualidad, y es un recordatorio de la importancia de la conexión con la naturaleza.
Partiendo de esos conceptos, Paucca explica en primer lugar la “pacha”, que hace referencia a términos como “modo de concebir el mundo”, pero también “mostrarse a sí mismo al mundo” o “enseñanza del mundo”. Así, señala que se relaciona tiempo, lugar, paisaje y, por supuesto, mundo o universo.
Aquí también explica que la “pacha” para los incas solía dividirse en el “hanan pacha”, o mundo de arriba, especialmente ligado al mundo celestial; “uku pacha” o mundo de adentro, ligado a la fertilidad; y el “kay pacha”, o mundo aquí, que tiene que ver con los seres vivos. En el centro de esto, los incas ubicaban el “chawpi” o punto medio, que articulaban los elementos de la pacha. De ese modo nos da un acercamiento a la forma de ver el universo que los rodeaba.
Evolución de los incas
El estudio «La cosmovisión en la sociedad incaica», de Nelson Paucca Gonzales, también aborda el tema de la educación incaica. El autor sostiene que la educación incaica estaba basada en el concepto de «runayachachiq», que significa «enseñar a los hombres».
El runayachachiq se dividía en dos categorías:
La educación formal, que estaba destinada a los hijos de la nobleza y los altos funcionarios. Esta educación se impartía en las escuelas llamadas yachachayoc wasi, donde se enseñaban materias como religión, historia, matemáticas, astronomía y medicina.
La educación informal, que estaba destinada al resto de la población. Esta educación se impartía en el hogar, en el trabajo y en las actividades comunitarias.
La educación incaica tenía como objetivo formar ciudadanos obedientes y productivos, que contribuyeran al bienestar de la sociedad. El autor destaca que la sociedad incaica era bastante organizada en comparación con otras sociedades de la época, y que esto se debía en parte a su sistema educativo.
Según el autor Nelson Paucca, los incas podrían ser vistos como el “resumen cultural de todas las culturas preincas”. Su cosmovisión se fue desarrollando a lo largo de cuatro generaciones:
- Uari Viracocha runa: La primera generación, que habitó la pacha (universo) en los primeros tiempos. Tenían un conocimiento rudimentario de la construcción, la siembra y otras actividades básicas.
- Wari runa: La segunda generación, que desarrolló un mayor entendimiento del mundo natural y social. Aprendieron a construir estructuras más complejas, como templos y fortalezas, y a cultivar alimentos más variados.
- Purun runa: La tercera generación, que era nómada y se vio obligada a adaptarse a condiciones adversas. Desarrollaron nuevas tecnologías para sobrevivir, como la construcción de viviendas más sofisticadas y la confección de prendas de vestir protectoras.
- Aucapacharuna: La cuarta y última generación, que llegó a la cima del poderío incaico. Eran guerreros hábiles y construyeron grandes fortalezas para defender su territorio.
Esta evolución de la cosmovisión incaica refleja el desarrollo de la cultura incaica en general. Los incas fueron un pueblo ingenioso y adaptable que logró crear una civilización próspera y avanzada.
¿Cómo veían los incas la muerte?
La tesis de Nelson Paucca Gonzales también aborda el tema de la muerte en la cosmovisión incaica. El autor sostiene que los incas inicialmente creían que la muerte era un momento de reposo, y que el ser fallecido volvería al cabo de unos días. Sin embargo, con el tiempo, la muerte pasó a ser vista como una forma de trascender a otra vida.
La importancia de los entierros incaicos radicaba en que eran una forma de preparar al difunto para su viaje a la otra vida. Los entierros variaban según la clase social del difunto, desde ceremonias muy simples hasta grandes demostraciones de poder, como los entierros de los monarcas, en los que incluso se practicaba la momificación.
Paucca explica que los incas creían que los runas (personas) que habían cumplido con las buenas costumbres eran dignos de trascender a la otra vida. Por otro lado, los runas que no habían cumplido con las buenas costumbres no podrían trascender tan fácilmente. Estos runas se quedarían buscando las pertenencias que habían dejado en la tierra. Una vez subsanado con el recojo de sus pertenencias, abandonarían el mundo de kay pacha (mundo de aquí). Los runas que no lograsen subsanar no trascenderían a la otra vida y se quedarían en el kay pacha.
La tesis de Paucca también detalla la relación de los incas con la naturaleza. Los incas se consideraban parte de la naturaleza y vivían en armonía con ella. El trabajo era considerado un hecho sagrado, y se instituyeron tres sistemas de trabajo comunitario: el ayni, la minka y la mita.
Elementos sagrados de los incas
La tesis de Nelson Paucca Gonzales también aborda el tema de la wakayachachik, que es el elemento sagrado de la cosmovisión incaica. El autor sostiene que la wakayachachik se refiere a todo aquello que es sagrado para los incas.
Paucca menciona varios elementos sagrados de la cosmovisión incaica, entre los que se encuentran:
- El apu: Los apus son las montañas sagradas de los Andes. Se cree que los apus son seres vivos que tienen un poder sobrenatural.
- El Inti: El Inti es el dios del sol. Es el dios más importante de la cosmovisión incaica.
- La waka: Las wakas son lugares sagrados, como templos, montañas, ríos o árboles. Se cree que las wakas tienen un poder sagrado.
- El taytanchiq: El taytanchiq es el lugar común de donde todos provienen. Se cree que el taytanchiq es un lugar de origen sagrado.
- El wakayachachik: El wakayachachik es el elemento sagrado que da vida a todo lo que existe. Se cree que el wakayachachik es una fuerza universal que está presente en todo el universo.
- El wirakocha: El wirakocha es el creador del universo. Se cree que el wirakocha es un dios supremo que está presente en todo el cosmos.
- El pachakamaq: El pachakamaq es el dios que ordena y mantiene el equilibrio del universo. Se cree que el pachakamaq es un dios poderoso que tiene el control del mundo.
Estos elementos sagrados eran importantes para los incas porque les ayudaban a comprender el mundo que les rodeaba. Los incas creían que los elementos sagrados estaban conectados entre sí y que formaban un todo armonioso.
¿Qué tradiciones incas se mantienen hasta la actualidad?
Las costumbres incaicas que perduran en el Perú
Los incas habitaron el Perú hace cientos de años, pero su cultura ha dejado un legado que perdura hasta nuestros días. Algunas de las costumbres incaicas que se siguen practicando en el Perú son:
- Las tradiciones relacionadas a la alimentación: Los incas cultivaban una gran variedad de cereales, como la quinua, el maíz y la papa. Estos cereales siguen siendo parte de la dieta básica de muchas personas en el Perú, y se utilizan para preparar platos típicos como la pachamanca, el ceviche y el arroz con pollo.
- Las ofrendas a la naturaleza: Los incas creían que la naturaleza era sagrada, y realizaban ofrendas a la tierra, la luna, el sol y la pachamama, la madre tierra. Esta tradición se sigue practicando en algunas comunidades andinas, donde se realizan ofrendas de alimentos, flores y otros elementos a los apus, las montañas sagradas.
- El uso del idioma quechua: El quechua es una lengua que se hablaba en el imperio incaico, y sigue siendo una lengua viva en muchas comunidades andinas. En el Perú, el quechua es el idioma oficial en algunas regiones, y es hablado por millones de personas.
- Las tradiciones culturales: Los incas tenían una rica cultura, que se refleja en sus tradiciones, como la música, la danza y las fiestas. Algunas de estas tradiciones se siguen practicando en el Perú, como el Inti Raymi, la fiesta del sol.
Estas son solo algunas de las costumbres incaicas que perduran en el Perú. Estas costumbres son un testimonio de la rica cultura e historia de este país.
